Descripción
El género Gibbaeum pertenece a la familia Azoaceae que es la misma en la que podemos encontrar a los lithops, las piedras vivas, por eso nos recuerdan a ellos pero sus cuidados y cultivo es muy diferente por lo que no aconsejamos mezclarlos en la misma maceta.
También son originarios del sur de África.
El cuerpo es de color gris verdoso y aterciopelado en el aspecto y en el tacto.
Necesita un sustrato mayoritariamente inorgánico que permita drenar muy bien el exceso de agua porque son plantas que se pudren con facilidad. En verano permanecen prácticamente inactivos por lo que el riego será esporádico o cuando veamos a las plantas arrugarse ligeramente.
En otoño y primavera que es su época de crecimiento habrá que regar más a menudo pero dejando secar la tierra entre riegos. El exceso de agua puede rajar la epidermis.
Necesitan una exposición muy luminosa cuidando de que el sol no sea fuerte para no quemarlos. En verano mejor tenerlos a la sombra.
Noemi Herrero Alfaro (propietario verificado) –
Tal cual la foto. A ver qué experiencias tengo, estoy esperando su floración.